El PP de Almuñécar repetirá pacto con sus anteriores socios para hacerse con el gobierno

Los aplausos en la sede del Partido Popular de Almuñécar la noche del 24M cada vez que los populares ganaban una mesa electoral en detrimento del Partido Andalucista de Juan Carlos Benavides fueron la prueba fehaciente de que el principal escollo para retener la alcaldía era superar al andalucista. Al cerrarse el recuento, vino el respiro y la alegría: los ocho concejales obtenidos por el PP le supusieron no sólo ser la lista más votada, sino rebasar en un edil a Benavides, formación política que no cuenta con el beneplácito de ninguna de las otras con representación municipal y con la que, a priori, nadie pactará. «Ni me veo como alcalde ni me postulo, y tampoco hemos tenido contacto con ninguna otra fuerza política», se sinceró el andalucista el jueves pasado.

Vía libre, por tanto, para que Trinidad Herrera continúe como regidora previo acuerdo con sus anteriores socios de gobierno, en concreto con el PMAS (antiguo PA), grupo liderado por Luis Aragón que, con sus dos ediles, es la llave que permitirá que los populares sigan en la alcaldía al sumar diez. De esta ecuación, y por tanto, de un gobierno en mayoría, se cae Izquierda Unida (un edil), quienes a pesar de dar su apoyo en el anterior mandato al PP, votando a favor en la investidura, en esta ocasión han transmitido que no será así, por lo que la unión de populares y el PMAS queda abocada a regir en minoría.

«Nosotros gobernaremos, salvo sorpresa, con el partido PMAS», afirmó ayer a IDEAL Trinidad Herrera, que señaló que confía en que las complicadas relaciones entre IU con el PA no les den un disgusto para sus intereses a última hora. «IU nunca entró en el equipo de gobierno, pero como es 'antibenavides' la postura lógica que tomaron en su momento fue la de apoyarnos para quitarles el Ayuntamiento, ya que él les maltrató la primera legislatura con representación municipal», aseguró la todavía regidora.

«Espero su apoyo»

Ante la perspectiva de que, en esta ocasión, no contará con el respaldo de la formación de izquierdas, Herrera incidió en que le bastaría con el PMAS para gobernar. «En la investidura espero el apoyo de IU, pero incluso si se abstienen saldría la lista más votada, que es el PP», especificó.

«Mi experiencia con el antiguo PA ha sido positiva; hemos trabajado perfectamente en equipo y me gusta contar con los demás, cuantos más, mejor», detalló la alcaldesa en funciones en referencia a su más que posible socio de gobierno, ya que, de esta forma, «se beneficia el municipio». «No hemos tocado nada, pero no creo que haya grandes cambios porque hay más gente; todavía no se ha perfilado nada, lo iremos viendo», añadió.

Para Luis Aragón la situación no es novedosa y la vive, por tanto, con mucha naturalidad. «Es un acuerdo más que un pacto; todavía no nos hemos sentado a hablar pero estamos pendientes», aseveró el dirigente de PMAS, que adujo a «cuestiones de lealtad» para mantener ese acuerdo. «En los cuatro años nos fueron muy bien, y desde ese punto de vista votar a otra formación es una incoherencia, por lo que ahora, con más motivo, apoyamos a la lista más votada», dijo.

«Gracias a nuestra gestión»

Aragón, que ha llevado el área de Medio Ambiente, Deportes y la delegación de servicios del barrio del Castillo en el mandato que expira, destacó que la subida de los populares en Almuñécar «ha sido, en parte, gracias a nuestra gestión», por lo que se congratuló de contribuir no sólo a eso, sino también a «apoyar cualquier propuesta democrática y conseguir quitar a los que no lo eran, por lo que ni nosotros ni IU apoyaremos a Benavides».

Del mismo modo, IU desveló ayer que el próximo día 13 de junio, fecha en la que está prevista la investidura del nuevo equipo de gobierno, no votarán al PP como hicieron hace cuatro años. «En asamblea hemos decidido que nos votaremos a nosotros mismos, lo que significará que Trinidad Herrera saldrá elegida pero sin nuestro respaldo», avaznó Luci Martín, número dos de IU.

«Cuando necesite el apoyo en temas claves nos sentaremos a hablar, pero al menos con el PP se puede negociar y hablar desde la confrontación, no desde el acoso», concluyó.

Salvo sorpresa, el gobierno sexitano poco cambiará.