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a. mansilla
Jueves, 24 de abril 2014, 19:48
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La patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil de Granada, con base en Motril, ha vuelto a levantar un trasmallo de unos cien metros de longitud que habían colocado los furtivos en la zona de baño de la playa del Tesorillo, en Almuñécar.
La red ilegal suponía un riesgo grave para los bañistas. Además de estar colocado en un lugar prohibido, el trasmallo carecía de cualquier señalización. La Guardia Civil ya ha iniciado las pesquisas para proceder a identificar al propietario.
En los últimos meses, han proliferado este tipo de artes de pesca ilegales, que son las que eligen los furtivos para actuar de madrugada. La Guardia Civil tiene claro que los furtivos prefieren los paisaje quebrados, donde predominan los acantilados y las playas tranquilas y normalmente pequeñas.
Esta práctica no está permitida y constituye un serio peligro para los bañistas.
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