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José Ramón Villalba
Martes, 15 de noviembre 2016, 02:39
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Los bomberos sofocaron la pasada madrugada del lunes un incendio originado en un contenedor y expandido a seis vehículos en apenas minutos. Las llamas también calcinaron un árbol y otro contenedor de basuras. No hubo heridos ni detenidos, aunque sí hay una investigación policial abierta para determinar quién o quiénes están detrás de este acto vandálico.
La Policía Local de Granada fue la primera en personarse en la calle Rosalía de Castro del Parque Nueva Granada en el distrito norte de la capital. Cuando llegaron había dos contenedores ardiendo y las llamas se extendieron en apenas segundos a un monovolumen al que se le rompió el tanque de gasolina. El combustible prendió y fue quemando coches, uno tras otro, hasta un total de seis. Incluso uno de los vehículos se desplazó y se metió en un jardín.
«Anoche fue un espectáculo. No sé qué diversión tiene quemar coches o contenedores. Estos son los niñatos», comentó ayer Manuela, una vecina de la misma calle. «Nos asomamos a las ventanas porque oímos sirenas y vimos el fuego, aquello parecía que se iba a meter en la casa. La policía nos dijo que cerráramos las ventanas», apunta Antonio Reyes, un jubilado que tampoco «comprende» a los autores de estos actos vandálicos. «¿Quién paga ahora todos los daños en los coches?», pregunta.
Andrés es un universitario de la residencia Fernando de los Ríos que también asistió anoche a este espectáculo de llamas. «Aquí en la residencia nos asustamos porque el fuego estaba muy cerca y no sabíamos si podía entrar».
La Policía Local inició rápidamente la localización de los propietarios de los vehículos aparcados en la calle Rosalía de Castro, para que los retiraran y así evitar que ardieran. Dos muchachas jóvenes, dueñas de uno de los turismos declarados en siniestro total, llegaron tarde sin tiempo para poder mover el coche y evitar que se incendiara.
El pasado año aparecieron quemados entre Granada, principalmente, y el cinturón metropolitano 120 turismos. Bastantes de estos incendios son de origen intencionado ajustes de cuentas entre bandas, venganzas, divorciado que le pega fuego al coche de la exmujer, o el caso típico del que roba un vehículo para cometer un robo y después lo quema para borrar huellas. Una cantidad sensiblemente superior a la de 2014 y a la de 2013 cuando se contabilizaron 93 siniestros de este tipo. La compañía de seguros o el consorcio de compensación abonan el dinero por estos daños en función de la causa, del valor del vehículo y de los años del mismo. En función de este dato se calcula una indemnización media de 6.000 euros por turismo, aunque la mayoría de los casos es mayor, algo que arroja una cifra de 720.000 euros.
Los descampados suelen ser los lugares elegidos por los vándalos para deshacerse de estos vehículos, sobre todo cuando han sido coches utilizados para efectuar robos y después han decidido deshacerse de ellos.
Bomberos de Granada advierten de que la pasada madrugada sólo tuvieron esa salida por quema de contenedores y vehículos. «No estamos teniendo demasiados problemas en los últimos meses con el incendio de contenedores, aunque siempre son los meses de diciembre y enero los más problemáticos», señala un mando de Bomberos de la capital granadina.
Granada, según datos de la Concejalía de Medio Ambiente referidos a 2015, necesitó reponer por actos vandálicos sesenta contenedores de carga lateral y cinco más de los destinados al depósito de vidrio. Estos sesenta y cinco depósitos costaron 64.000 euros, una cantidad de dinero nada baladí a la que deben añadirse otros 19.930 euros de la instalación de 239 papeleras nuevas en sustitución de las quemadas o arrancadas por acciones vandálicas.
Un bombero consultado por este periódico asegura que el «90% de los incendios de contenedores y papeleras son de origen intencionado», concentrándose en días de fin de semana y en los distritos de «Norte, Centro y Zaidín», principalmente, en los meses de enero y diciembre. Fuera de la capital, el origen puede deberse también a otras causas: «por ejemplo arrojar cenizas mal apagadas de una chimenea al contenedor».
La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer los hechos ocurridos la pasada madrugada del lunes. Hay una cámara de seguridad de la residencia universitaria Fernando de los Ríos que podría haber recogido la imagen del autor o autores que incendiaron el contenedor, origen del incendio. «Si esto hubiera ocurrido en verano, cuando los vecinos duermen con las ventanas abiertas, podríamos estar lamentando algún problema mucho más serio», señala un bombero.
Los vecinos han mostrado su malestar por lo ocurrido y piden que se busque a los autores de estos actos vandálicos.
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