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El fiscal pide cárcel para un constructor por extorsión, tenencia de armas y estafa

El escrito del ministerio público indica que, acuciado por su situación económica, el constructor envió "a personas de su confianza" para que amedrentaran a otro empresario con el que había mantenido relaciones comerciales y que, supuestamente, le debía más de cuatro millones de euros

Carlos Morán

Viernes, 17 de abril 2015, 00:45

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Una patrulla de la Policía Local de Granada da el alto a un Porsche Carrera 911 que circula por la Avenida de Andalucía. El vehículo de lujo pertenece a un empresario de la construcción, pero él no es el que va al volante. Los agentes encuentran en el interior del automóvil una pistola semiautomática marca Glock 19 "sin número de serie visible al haber sido eliminado mediante fresado". También hallan trece cartuchos.

Eso ocurrió el 5 de junio de 2007 y la fiscalía de Granada ha acusado ahora al conductor del coche, al constructor y a una tercera persona de la presunta comisión de un delito de tenencia ilícita de armas y solicita para cada uno de ellos una pena de dos años y seis meses de prisión.

Es el cargo más llamativo de los que figuran en el escrito del ministerio público y afectan directamente al empresario, pero no él único. Hay más.

El fiscal también imputa al procesado por extorsión. En este sentido, indica que, acuciado por su situación económica, el constructor envió "a personas de su confianza" para que amedrentaran a otro empresario con el que había mantenido relaciones comerciales y que, supuestamente, le debía más de cuatro millones de euros. El señalado recibió dos visitas de lo matones, siempre según el relato de la fiscalía. La primera tuvo lugar en una cafetería. Dos individuos se acercaron hasta la víctima y, "en tono de gran agresividad, le conminaron a que solucionara sus problemas" con su exsocio, esto es, el constructor procesado.

"Te corto una oreja"

Un par de semanas después, la historia se repitió, pero esta vez los matones ya eran cinco y se presentaron en la oficina de la víctima, que en aquel momento no estaba allí. Los enviados la tomaron entonces con una empleada. Arrojaron sobre la mesa de la trabajadora un pagaré en el que aparecía la supuesta deuda de más de cuatro millones de euros y después le espetaron lo siguiente: "Porque eres una mujer, si no te rajo, te corto una oreja y luego un dedo".

En otra ocasión, y siempre según el relato de los hechos elaborado por la fiscalía, los guardaespaldas del constructor encausado agredieron a un matrimonio que reclamaba una deuda de 60.000 euros.

Aparte de eso, el ministerio público afirma que el sospechoso que será juzgado por la Audiencia Provincial de Granada junto a otros diez acusados estafó, presuntamente, a quince personas al venderles viviendas que pretendía construir sin licencia de obras. En total, el principal encausado se enfrenta a penas que casi suman ocho años de prisión.

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