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Isaac Triguero Velázquez, de la UGR a Bélgica.
Los talentos que han emigrado esperan que la Junta concrete su oferta para volver

Los talentos que han emigrado esperan que la Junta concrete su oferta para volver

La reducción de ayudas y los recortes les obligaron a emigrar; ahora se abre una rendija con el plan de retorno, pero aún no hay nada concreto

ANDREA G. PARRA

Miércoles, 15 de octubre 2014, 00:55

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Años de formación, expedientes de matrícula de honor, miles de euros invertidos en ellos, pero ni Andalucía ni el resto de España tienen dinero para ofrecerles un puesto de trabajo. La situación es cada vez más difícil para los jóvenes investigadores que terminan sus tesis. Han estado años con becas, contratos y otro tipo de ayudas (FPU, FPI, programas propios.) pero una vez que se doctoran y se terminan estas estancias no hay prácticamente más opción que emigrar si quieren seguir con la carrera científica y docente.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, dijo en la apertura oficial del curso 2014-2015 que están ultimando un plan de retorno del talento. Afirmó que este curso pretende que sean 470 las personas que se beneficien. No aportó más datos.

El rector de la Universidad de Granada (UGR), Francisco González Lodeiro, reclamó programas que incentiven la recuperación de talento y la incorporación de doctores en el sistema de ciencia y tecnología como un elemento esencial para el pleno desarrollo de la sociedad del conocimiento.

Inquietud

La vicerrectora de Investigación de la institución universitaria granadina, María Dolores Suárez, explica que no tienen datos concretos de cuántos universitarios tras hacer la tesis y doctorarse se han ido al extranjero porque no han tenido opciones en la UGR u otras universidades andaluzas y del resto del país. «La situación y el recorte en recursos humanos es preocupante», dice Suárez. No obstante, confía en que habrá un cambio y todo irá a mejor. «No podemos perder a estos investigadores tan bien formados», reclama, jóvenes como los que narran su experiencia a continuación.

Isaac Triguero Velázquez

Posdoctoral en la Univ. de Gante

«En Bélgica gano casi el doble que en Granada»

Isaac Triguero Velázquez es de Atarfe. Estudió Ingeniería Informática en la Universidad de Granada (promoción 2004-2009). En 2010 empezó el doctorado en Tecnologías de la Información dirigido por los doctores Francisco Herrera y Salvador García. Durante el doctorando tuvo diferentes contratos. En 2010 estuvo contratado en el proyecto de investigación CIBIC liderado por el doctor Benítez. A continuación, consiguió una beca FPU del plan propio de la Universidad granadina que disfrutó durante todo 2011, para pasar a la beca FPU del Gobierno a final de año. Finalmente, en febrero de 2012, rechazó la beca FPU para pasar a una beca asociada a proyecto de excelencia de la Junta de Andalucía.

«En resumen, que he estado desde enero 2010 hasta septiembre 2014 trabajando en el departamento de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial de la Universidad de Granada», cuenta Isaac Triguero. La carrera no ha sido fácil.

Mucho trabajo, buenas notas. y se ha tenido que ir fuera. «Muy recientemente, el 1 de octubre, me incorporé al 'Inflammation Research Center' de la Universidad de Gante (Bélgica) como investigador post-doctoral en el laboratorio del profesor Bart Lambrecht. He recibido una beca BOF de la Universidad de Gante (Ghent University) con una duración de tres años», relata desde Bélgica.

Su investigación actual se centra en el diseño de algoritmos escalables de minería de datos que sean capaces de abordar grandes bases de datos (Big data) para problemas de bioinformática. Concretamente, el objetivo es analizar los datos proporcionados por aparatos de citometría de flujo que miden diversas características morfológicas de las células, teniendo por objetivo la predicción de potenciales enfermedades.

¿Por qué se ha ido? «Quedarse en la Universidad de Granada ya se veía difícil o casi imposible desde que comencé el doctorado. No obstante, siempre nos quedaba la esperanza de que pudiese aparecer alguna oportunidad en el resto de España. Para ello, gracias al empuje de mis directores de tesis, luchamos por hacer un extenso número de publicaciones científicas de alta calidad -actualmente, 16 publicaciones en revistas JCR-. Sin embargo, desde hace ya años estoy viendo como aquellos compañeros que finalizaban el doctorado, con un currículum envidiable, no encontraban una plaza como docente, siendo éste el principal objetivo para la mayor parte de nosotros. El paso natural para un recién doctor sería pasar a una beca post-doctoral o incorporarse como profesor ayudante doctor», cuenta.

«Por un lado, las becas postdoctorales en España son muy escasas y, curiosamente, aquellas que existen valoran y mucho la experiencia en el extranjero. Tras más de dos años donde el sistema universitario español parecía estar totalmente parado, es cierto que este año se ha visto 'algo de movimiento'. Sin embargo, para los que acabamos de terminar el doctorado, sigue siendo casi imposible luchar por una plaza, puesto que existen numerosos investigadores con más años de experiencia -muchos de ellos ya han estado fuera- que aún no han logrado estabilizarse. Por todo ello, antes de finalizar el doctorado en abril de este año 2014, ya había enviado esta solicitud de beca postdoctoral en Bélgica», matiza.

En Bélgica Isaac Triguero va a ganar casi el doble que ganaba como becario predoctoral de la Junta de Andalucía, y a la altura de lo que ganaría si fuese profesor titular con varios tramos de investigación. «En cuanto a estabilidad, tampoco es fácil encontrar un trabajo permanente como docente, pero las opciones de continuar y extender mi beca actual ya son una realidad. Por así decirlo, continuar con una carrera académica ya solo depende de mí, de mi esfuerzo y dedicación».

Sobre el plan del talento que ha anunciado la Junta dice: «Desconocía dicho plan de retorno. Podría ser una opción, obviamente no la descartaría. Sin embargo, asumiendo que el salario y las condiciones seguramente serán peores que las que tengo aquí en Bélgica, lo que buscaría en dicha oportunidad es 'estabilidad'».

Victoria López Morales

Investigadora en el Imperial College London

«Me fui de España por la falta total de oportunidades»

La granadina Victoria López cursó los estudios de Ingeniería en Informática (de 2004 a 2009) en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Informática y de Telecomunicación de la Universidad de Granada (UGR). Siguió en el citado centro con la realización del Máster en Soft Computing y Sistemas Inteligentes en el curso 2009-2010. A partir de ahí, cursó los estudios de doctorado de 2010 a 2014, en los que profundizó en el estudio de técnicas de Soft Computing para la clasificación con conjuntos de datos no balanceados, un problema de minería de datos que se enmarca dentro de la inteligencia artificial. Comenzó a trabajar en la Universidad granadina hace cuatro años a través de una ayuda FPU, dando clase en el grado en Informática en los dos últimos años.

Ahora está preparando las maletas para su nuevo destino investigador, el Imperial College London, en Londres, Reino Unido. El 1 de noviembre comenzará a trabajar allí como investigadora postdoctoral en proyectos relacionados con el diseño de nuevos métodos para procesamiento escalable de datos y la mejora de estructuras y herramientas de procesamiento paralelo. El contrato es de un año de duración.

«La razón principal para marcharme al extranjero es la total ausencia de oportunidades para continuar mi carrera investigadora en España. Las opciones disponibles para continuar la carrera investigadora en este país involucran la consecución de una plaza docente en la universidad, ser beneficiario de un contrato post-doctoral del Gobierno o la obtención de un contrato en un centro de investigación o el departamento de I+D de una empresa privada. Ninguna de estas opciones está realmente disponible para un investigador recientemente doctorado: las medidas impuestas para afrontar la crisis han reducido a la mínima expresión las nuevas plazas docentes en universidades, las ayudas postdoctorales del ministerio, incluidas aquellas que se orientan a investigadores con experiencia post-doctoral limitada, son copadas por investigadores que tienen experiencia postdoctoral en el extranjero, los centros de investigación apenas tienen fondos para su funcionamiento por lo que no contratan nuevo personal y las empresas que contratan investigadores normalmente lo hacen para sus sedes fuera de España. En cualquiera de estos casos, estamos a años luz de las posibilidades abiertas a un investigador en el extranjero».

López destaca que «el sueldo de mi contrato en Reino Unido es prácticamente el doble que el de un investigador postdoctoral contratado a través de las ayudas del ministerio. A pesar de que el contrato del que dispongo en el Reino Unido está limitado en el tiempo, sí que se puede apreciar una gran diferencia en cuanto a la estabilidad de los investigadores. En España, encontrar una oferta para investigadores en el campo de la informática es casi como encontrar una aguja en un pajar; en Reino Unido, cada día aparecen nuevas ofertas de investigación relacionadas con el área, lo que facilita la obtención de nuevos contratos rápidamente».

En referencia al plan de la Junta opina lo siguiente, lo valora, pero pide que se haga realidad. «Me parece positivo que la Junta sea consciente de que hay que recuperar el talento que se ha marchado. Aunque el anuncio que se ha realizado realmente no concreta nada y da la impresión de ser una propaganda más para decir que se hace algo cuando realmente no es así. Es duro marchar al extranjero dejando aquí tus raíces, tu familia y tus amigos, por lo que sí me gustaría volver si se diesen las condiciones adecuadas. Para ello, una de las condiciones indispensables sería una apuesta seria y decidida por la investigación en forma de una carrera investigadora clara, definida y con perspectiva. Esto implicaría la posibilidad real de poder dedicarse a la investigación de forma permanente».

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