Los mayores ya disfrutan de la nueva estancia diurna en San Juan de Dios

La residencia de Mayores de San Juan de Dios abrió ayer el área de estancia diurna de 200 metros cuadrados. Los criterios de funcionalidad y comodidad fueron primordiales para esta espacio que anteriormente era «lúgubre y aburrido», según declararon usuarios del centro.

Las obras de remodelación han supuesto un desembolso de 80.000 euros con cargo a los fondos procedentes del IRPF y al propio centro para la reforma integral. La renovación se ha llevado a cabo durante los tres meses del verano para modernizar y adaptar los espacios que sus profesionales demandaron, además de un ascensor nuevo con primeras calidades y un monitor que ofrece en el espacio música de fondo y noticias de prensa.

Al acto de inauguración acudió el superior de la Orden, José Antonio Soria Craus, antiguo responsable del centro, que manifestó su satisfacción al ver la estancia acondicionada con todas las comodidades para los mayores y afirmó la constante revisión a la que están sometidas todas las obras sociales de San Juan de Dios. «Ofrecemos más calidad y más calidez», dijo Soria Craus. Además, estuvieron presentes el director general de centros de la Orden Hospitalaria, Juan José Afonso y el gerente del Hospital San Rafael y la Residencia de Mayores, José Luis Salcedo, que mostraron su alegría por la renovación del centro. «Hemos cumplido con lo que queríamos transmitir, alegría», expresó el gerente.

Esta unidad especializada dentro de la residencia, en la calle Convalecencia, se divide en tres zonas principales: la sala de estar equipada por butacas y televisión, la sala de atención especializada para la realización de diversas actividades como gimnasia o juegos como el dominó y el comedor.

Se trata de un espacio reformado que ha atendido criterios de adecuación para la mejora en funcionalidad de los espacios, dotarlos de luz natural y una mejor iluminación artificial. Asimismo, en concordancia con la calidez y la armonía que el centro pretendía con estas obras, se ha renovado el mobiliario así como la decoración de los espacios en tonos verdes y blancos para crear sensación de frescura y pureza. «El centro ha tomado forma y color, es alegre y muy cómodo», afirmó Pilar, sentada en su nuevo sofá de relax. Satisfecha con la reforma, dijo que fue cuestión de dinero y buen gusto. «Estoy muy bien atendida y no tengo pensado marcharme; aquí no eres un número porque te llaman por tú nombre», agradeció Pilar.

Dos décadas de trabajo

La Unidad de Estancia Diurna San Juan de Dios, que cumplirá 20 años en 2015, dispone de 14 plazas concertadas con la Junta de Andalucía para personas mayores de 65 años que se encuentran en situación de dependencia leve o moderada.

El horario es de lunes a viernes de 09.00 a 17.00 horas. La mayoría de los mayores acuden al centro porque les proporcionan el transporte de ida y vuelta hasta sus domicilios. Manuel, usuario del centro, manifestó ser un afortunado por estar en la estancia diurna. «Vivo solo y cada mañana a las 09.00 horas pasa la furgoneta para recogernos, aunque algunas veces a las 10.00 horas porque hay alguna 'despistaílla'», declaró.

En este horario de apertura, un equipo formado por profesionales de la medicina, fisioterapia, enfermería, terapeutas ocupacionales y voluntarios que trabajan con los mayores de forma individual o en grupo, en función de las necesidades de cada uno, además de prestarles una atención especializada. Soledad pierde la cuenta con la variedad de actividades que tiene el centro. «Hacemos gimnasia todas las mañanas mientras los chicos juegan al bingo. Después comemos y antes de irnos a las 17.00 horas vemos la televisión», explicó Concha.

Peluquería y podología

En el centro de mayores además de recibir el desayuno, el almuerzo y la merienda, los integrantes pueden optar a los servicios de peluquería y podología. Durante todo el día participan en talleres de habilidades sociales y estipulación cognitiva, actividades lúdicas y culturales, como el cine fórum, rehabilitación, fisioterapia o reentrenamiento de actividades básicas de la vida diaria. También se llevan a cabo los controles sanitarios de los mayores y se ofrece asesoramiento familiar y de recursos sociales a quienes lo soliciten. Los 14 integrantes de la estancia diurna abonan al mes desde 700 euros para usuarios privados hasta 100 euros para beneficiarios.

El centro, que funciona desde 1977, comprende tres unidades de atención: la Residencia de Mayores que cuenta con 70 plazas, los apartamentos tutelados con 13 plazas ocupadas por mayores autónomos e independientes y la estancia diurna con 14 plazas.