El cableado del Barranco desaparece tras diez años de reclamación vecinal

El Barranco del Abogado, tan lejos y tan cerca del corazón de la ciudad, ve este verano cómo el horrible y criticado cableado eléctrico aéreo va desapareciendo de sus calles y tejados tras diez años de intensas reclamaciones. Los trabajos empezaron ya hace un par de meses desde la Cuesta del Caldero y ya se ha limpiado de tendido eléctrico la mitad del barrio, aunque quedan todavía varios postes repletos de cables por quitar, según apunta Dolores Pandilla, la activa presidenta de la asociación de vecinos del Barranco del Abogado.

Recuerda la presidenta vecinal que llevamos «muchos años pidiendo que se quiten cables»y calibra que «en una década hemos logrado que se retiren cuatro torres, postes de alta tensión grandísimos. Hay que pensar que el barrio estaba repleto de postes eléctricos de este tipo».

Se está realizando ahora un buen trabajo, entienden los vecinos, «porque hemos conseguido que nos quiten la mitad de ellos que afeaban todo el barrio. Concretamente, desde la entrada al Camino Nuevo del Cementerio, donde los semáforos para subir a la Alhambra o bajar al campo del Príncipe, hasta la altura de la propia sede de la asociación de vecinos, en el número 26», señala Dolores Pandilla.

Pero también hay peros:«tenemos un poste que es un monstruo eléctrico, que no pueden quitar, y ahí estamos todos luchando. Está a la altura del número 22». «Nos argumentan razona, que tras la obra que se hizo en toda la calle no se hizo la zanja pertinente para soterrar los cables y por eso no se puede quitar». Pero no se contentan tras una década de reivindicaciones y «ahora hemos pedido quitar el cableado restante, incluido el poste eléctrico que hay entre los árboles a la altura del pilón de agua».

La segunda fase

La segunda fase de retirada de estos postes eléctricos es la que va a lo largo del Camino Nuevo del Cementerio, en el cruce de la calle Alta con Monte Señero, hasta la entrada del Balcón de Granada. «Queremos quitar un poste terrible que hay y quitar los que cruzan por la gruta de la Virgen de Lourdes por encima». El problema no es baladí. Hay una urbanización en este punto que «mantiene dos casas sin que nadie las quiera comprar precisamente por estos cables de alta tensión. Claro, se supone que tenían que haber desaparecido, pero ahí están todavía», señala la presidenta vecinal del barrio del Barranco del Abogado. Han recurrido en multitud de ocasiones a la junta municipal de distrito, a ellos les corresponde Centro, junto al Realejo y el Sagrario, «y en los presupuestos que han dado para el año 2015, pedimos esta actuación como de carácter urgente. Nada de alumbrado o asfaltado, que aunque lo es, queremos terminar con lo de los cables eléctricos de una vez por todas», añade Dolores Fandila, que remata:«La eliminación del cableado nos parece mucho más importante que arreglar las calles».

Hay que recordar que esta batalla del Barranco del Abogado contra el tendido eléctrico aéreo dura ya una década. Fue en agosto del año 2004 cuando se anunció por fin que «los vecinos del Barranco del Abogado perderían de vista los polémicos postes de luz de media tensión que siembran el paisaje». No es el único dato que guarda la hemeroteca en sus entrañas. Apenas ha pasado un año y se puede leer en abril de 2005 que «el convenio firmado por Endesa y el Ayuntamiento también contempla el soterramiento de dos de las líneas aéreas de media tensión que se encuentran en zonas de impacto paisajístico». Así hasta hoy.