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José Ramón Villalba
Miércoles, 18 de junio 2014, 10:27
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La Policía Nacional encontró este martes el cadáver de un varón en estado de descomposición en el asiento trasero de un vehículo que llevaba estacionado varios días en un aparcamiento público del distrito Beiro, concretamente el ubicado cerca de la antigua Ponderosa, hoy centro cultural de Beiro. Fueron los trabajadores de este párking quienes se percataron de que en el interior del coche había un individuo, cuya edad exacta no ha trascendido, aunque se estima que pueda estar en torno a los cuarenta años. Los responsables del aparcamiento contactaron con la Policía Nacional, que se personó en el estacionamiento pasadas las once y media de la mañana de ayer. Tras acceder al interior del coche, pudieron comprobar que este individuo se encontraba muerto y aparentemente no presentaba signos de violencia. A primera vista y en espera de los resultados de las pruebas practicadas por Policía Científica, en el interior del coche no aparecieron manchas de sangre.
Las labores de identificación se complicaron en un principio porque el fallecido no portaba el documento nacional de identidad donde aparece su filiación. La matrícula del vehículo donde se encontraba este individuo ha sido la pista capaz de aportar algo de luz a este caso.
El coche estaba denunciado como desaparecido por la empresa de alquiler de automóviles que lo arrendó, supuestamente a la persona que ha aparecido en su interior sin vida. Por otro lado, la familia del fallecido también había denunciado su desaparición hacía unos días. El cadáver fue trasladado ayer, a primera hora de la tarde, al Instituto de Medicina Legal del Parque Tecnológico de la Salud donde hoy por la mañana se le practicará la autopsia para conocer de primera mano en qué circunstancias falleció y cuánto tiempo llevaba muerto.
Policía Nacional se encuentra a la espera del informe forense para determinar si hay o no hay caso policial, ya que de momento no se descarta ninguna hipótesis, ni tan siquiera la de un posible suicidio, una más de las posibilidades manejadas por los investigadores.
La desaparición del fallecido se denunció en la capital granadina, aunque el individuo es natural de un pueblo de la provincia.
En un principio tiene que transcurrir un mínimo de 24 horas desde la desaparición de una persona para poder iniciar la correspondiente investigación policial en aras de encontrar a ese individuo.
Fuentes consultadas por este periódico confirmaron que el cadáver se encontraba en estado de descomposición, lo cual complica bastante el percibir si tenía alguna lesión provocada por una acción violenta y puede servir de muestra de que esta persona llevara muerta más de un día, como mínimo.
Además de las pruebas recabadas en el coche donde apareció muerto este individuo, la Policía Nacional analiza los vídeos de este estacionamiento del distrito Beiro para saber el día que fue aparcado el automóvil y también se está entrevistando con familiares y allegados de la víctima.
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