Los escraches de Granada se equivocan de casa

Los escraches granadinos quisieron secundar ayer la movilización nacional pero se equivocaron de casa. Un grupo reducido se sumó a la convocatoria promovida por varios sectores alternativos a nivel nacional. La Policía, que tiene desde el pasado fin de semana un dispositivo de los antidisturbios preparado por el Centro de la capital, estaba en alerta.

A partir de las siete de la tarde un número ni siquiera significativo se concentró ante la sede del PP en la capital, donde se han vivido recientemente situaciones similares. No se produjo ningún altercado y los manifestantes se dispersaron pronto.

Pero alguno de los cabecillas del grupo planteó una alternativa sobre la marcha y pidió al resto que le siguiera hasta la casa de la diputada Concha de Santa Ana, que según pensaba se encontraba en una calle próxima a la sede del PP. Y hasta allí se fueron sin cuestionarlo.

Sin embargo, Concha de Santa Ana que, además, estaba ayer en Madrid tiene su residencia a varios kilómetros. El domicilio señalado por los escraches es en realidad la casa donde viven su madre y su hermana. Una mala improvisación.

Condena

Al respecto, el presidente del Partido Popular de Granada, Sebastián Pérez, calificó como "inaceptables" los "acosos que están sufriendo los distintos representantes y trabajadores del PP" y apuntó que se trata de "un atropello a la voluntad popular expresada en las urnas".

Pérez, que expresó su "solidaridad y cariño" con la familia de de Santa Ana, señaló que "los hechos, algunos conocidos y otros no, que se están repitiendo en las últimas semanas contra los domicilios o las propiedades privadas de responsables del PP suponen una alteración de las reglas democráticas porque suponen un intento de presionarles y de alterar su acción política por la vía de la coacción en sus núcleos familiares. El acoso es intolerable en todos los ámbitos de la sociedad, también en el político".

Para el presidente del PP, "el hostigamiento y persecución a los dirigentes y trabajadores populares no tiene que ver ni con la libertad de expresión, ni con el legítimo derecho de los ciudadanos a expresar opiniones contrarias a las acciones de gobierno", para lo que, a juicio de Pérez, "existen, tanto en nuestra práctica política, como en el ordenamiento jurídico español, fórmulas perfectamente adecuadas".

En relación con la plataforma contra los desahucios que convocó este martes la concentración en la sede del PP que acabó en el domicilio familiar de la diputada Concha de Santa Ana, el presidente provincial del Partido Popular aseguró que comprende "la difícil situación que atraviesan familias que no pueden pagar sus hipotecas, en ocasiones sustentadas con cláusulas claramente abusivas", pero añadió que "el acoso no puede ser la fórmula de defender una postura política".