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CARLOS BALBOA , @charlybalboa
Jueves, 14 de marzo 2013, 13:30
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El deslizamiento de la ladera en Pinos Genil a consencuencia de las llucias caídas provocó el pasado martes el desalojo de la urbanización ubicada en la Carretera de la Sierra número 50. Los bomberos así lo determinaron tras evaluar el serio riesgo que sufrían sus viviendas. La prioridad ahora, según sostiene José Miguel Azañón, director del Departamento de Geodinámica de la UGR, tiene que ser la de asegurar la contención de la ladera. Una vez que esto haya tenido lugar, una solución para que esta situación no se vuelva a repetir puede ser la de vegetar el terreno.
Azañón, que también trabaja en el Instituto Anzaluz de Ciencias de la Tierra, revela que "ahora son las casas las que ejercen de muro de contención de la ladera". En condiciones normales, añade, "es el suelo el que aguantaría el movimiento, incrementa la filtración y posibilita que el agua pase".
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