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Buscan a 5 personas en Granada por estafar a ancianos con timos de estampita y tocomocho

En el caso de Salobreña los estafadores eran un hombre de mediana edad, una mujer de más de 60 años y una menor que se hacía pasar por disminuida psíquica

EFE

Viernes, 28 de septiembre 2012, 22:31

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La Guardia Civil busca a tres estafadores que se hicieron con 4.800 euros mediante el timo de la estampita en Salobreña y a otros dos que consiguieron 3.000 euros con el timo del tocomocho en Churriana de la Vega, tras engañar a una mujer de 69 años y a un hombre de 82, ambos en la provincia de Granada.

Según ha informado el instituto armado en un comunicado, en el caso de Salobreña los tres estafadores eran un hombre de mediana edad y pelo negro, una mujer de algo más de 60 años y pelo rubio y una menor de edad, que se hacía pasar por disminuida psíquica.

Esta última se acercó este jueves por la mañana llorando hasta su víctima, una mujer de avanzada edad, con un billete de 20 euros roto en una mano y un grueso fajo de billetes de 50 euros en la otra, diciéndole que una señora en el parque se los quería quitar.

En ese momento se acercó hasta ellas la pareja de estafadores y simularon que intentaban quitarle el dinero a la niña, pero ésta dijo que sólo se lo entregaría a la víctima a cambio de billetes nuevos.

La mujer estafada acudió a su casa, cogió su cartilla bancaria, sacó de su cuenta corriente 4.800 euros y se los entregó a la niña a cambio de una bolsa de plástico que supuestamente contenía el fajo de billetes que había visto anteriormente.

Cuando la víctima abrió la bolsa y comprobó que sólo había recortes de periódico, los tres estafadores habían huido.

En el caso de Churriana de la Vega fueron dos los estafadores que se acercaron hasta un anciano de 83 años, el primero un hombre de unos 30 años, con acento gallego, que se hacía pasar por disminuido psíquico, y el segundo, un hombre alto, de complexión media y pelo corto castaño.

El que se hacía pasar por disminuido psíquico abordó al anciano y le dijo que llevaba en el bolsillo unos boletos de lotería premiados, instante en que se presentó un segundo hombre y sacó dinero para comprarle los billetes de lotería al supuesto disminuido.

Al mismo tiempo, convenció a la víctima para que hiciera lo mismo y poder así repartirse los supuestos "décimos premiados" entre los dos.

Una vez convencido, acompañaron a su víctima hasta su casa, donde cogió su cartilla de ahorros e intentó efectuar un reintegro de 15.000 euro, aunque sólo pudo sacar 3.000.

Los estafadores montaron al anciano en su coche y lo llevaron hasta Granada, en dónde el que conducía le dijo que se tenía que bajar del vehículo, que iba a llevar al supuesto disminuido a su casa y que más tarde volvería a por él, lo que no ocurrió.

Cuando el anciano llegó a su casa en la bolsa en donde esperaba encontrar los décimos de lotería premiados, sólo había trozos de papel.

Según la Guardia Civil, estos hechos demuestran que hay timos que "sobreviven al paso del tiempo" y ciudadanos, normalmente personas de avanzada edad, que no aprenden.

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