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«Hay zonas destruidas en un 50%»
TRAGEDIA EN EL CARIBE

«Hay zonas destruidas en un 50%»

Moratinos calcula que "quedarían todavía cinco, seis o siete" por contactar

AGENCIAS

Sábado, 16 de enero 2010, 03:34

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Tres días después del terremoto, Puerto Príncipe sigue siendo sinónimo de caos y muerte. Un primer reconocimiento aéreo realizado por Naciones Unidas en Haití ha revelado que hay áreas "con un 50% de destrucción" o graves daños, ha señalado hoy la Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU. Según ha comprobado la ONU, además de Puerto Príncipe, los centros urbanos de Jacmel y Carrefour han resultado muy afectados. Un total de 3,5 millones de personas vivía en las áreas devastadas por el terremoto y calculan que alrededor de 300.000 se han quedado sin techo sólo en la capital.

La Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU ha afirmado también que el acceso a los damnificados sigue siendo limitado por los obstáculos en las vías y la congestión del tráfico y que la evaluación completa de los daños tomará días. Aunque las autoridades y algunas informaciones han empezado a hablar de desórdenes y pillaje, la ONU ha indicado que "hasta el momento, la situación de seguridad se mantiene estable".

La ONU mantiene como prioridad la asistencia para la búsqueda y rescate de víctimas, lo que deberá incluir la llegada a Haití de equipamiento pesado y material médico. Seis equipos dedicados a esa misión se encuentran ya en la isla, a los que se unirán hoy 21 equipos adicionales de la organización internacional.

En cuanto a los servicios básicos, no hay abastecimiento de agua ni electricidad, y la mayor parte de las comunicaciones siguen cortadas. Sobre la situación del aeropuerto de Puerto Príncipe, la Oficina Humanitaria de la ONU ha indicado a su vez que el aeropuerto de Puerto Príncipe sólo está operativo para vuelos militares y humanitarios, y que la falta de combustible y de equipos para la descarga son un gran problema. Por esa razón, los aviones que llegan deben ser capaces de regresar con sus propias reservas de fuel, ha señalado.

Se reanudan los vuelos

Y es que la descoordinación reinante se ha extendido al espacio aéreo, hasta el punto de que en medio de una movilización de ayuda humanitaria internacional sin precedentes se habían suspendido algunos permisos de aterrizaje en el aeropuerto de la capital de Haití por saturación y escasez de fuel.

La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos volvió a autorizar la madrugada de este viernes (hora española) la salida de vuelos hacia la capital con trabajadores humanitarios y suministros a bordo, según ha informado la cadena norteamericana CNN. La FAA impuso una parada en tierra de todos los vuelos que hubiesen despegado desde el espacio aéreo estadounidense hacia el país ante el colapso del aeropuerto de Puerto Príncipe. Hasta 11 aviones se habían visto obligados a dar vueltas sobre el espacio aéreo haitiano sin autorización para aterrizar.

El terremoto de 7 grados en la escala de Richter que sacudió Haití el martes fue 35 veces más potente que la bomba atómica arrojada sobre Hiroshima (Japón) en 1945 y comparable a la explosión de medio millón de toneladas de TNT, según ha dicho Roger Searle, profesor de Geofísica en la Universidad de Durham (Reino Unido). El epicentro del seísmo, que fue seguido de tres réplicas de 5,9, 5,5 y 5,1 grados, se situó a solo 15 kilómetros de la capital haitiana, que vive una emergencia social de enormes proporciones desde ese día, con miles de personas en las calles, los hospitales colapsados y las comunicaciones cortadas o funcionando muy mal.

A falta de datos oficiales, la Cruz Roja local calcula que han muerto entre 45.000 y 50.000 personas, y hay tres millones de damnificados, incluyendo a heridos y personas sin hogar, según uno de sus responsables, Víctor Jackson. Un diez por ciento de las viviendas de Puerto Príncipe se han derrumbado o han quedado inservibles, según fuentes de la Oficina de Asuntos Humanitarios de la Comisión Europea en la capital haitiana. Las peticiones de ayuda de las autoridades haitianas han tenido eco en todo el mundo; sin embargo el caos y la falta de organización y coordinación son una traba para que todo lo prometido e incluso lo que ya está en camino llegue a sus destinatarios, como demuestra el colapso aéreo. "No se ha puesto en marcha ni siquiera una célula de gestión de la crisis", ha destacado la web de Radio Metropole.

Movilización internacional

Los ministros de Desarrollo de los países de la Unión Europea, actualmente bajo presidencia española, se reunirán el próximo lunes a fin de definir la estrategia de ayuda a medio plazo a Haití, según ha informado la responsable comunitaria de Relaciones Exteriores, Catherine Aston. Por su parte, Nicolás Sarkozy, presidente de Francia, la antigua metrópoli de Haití, ha anunciado en París que propondrá a sus homólogos estadounidense, Barack Obama, y brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, la celebración de una "gran conferencia" para reconstruir el país caribeño. Sarkozy ha señalado que se desplazará a Haití "en las próximas semanas". Otros presidentes que tienen planes de viajar al país caribeño son el colombiano Álvaro Uribe, este domingo, y la chilena Michele Bachelet, en febrero.

El Gobierno de Estados Unidos, por su parte, va hacer "uno de los mayores esfuerzos de asistencia humanitaria" de su reciente historia en Haití, en palabras del presidente Barack Obama, que ha anunciado una ayuda inicial de 100 millones de dólares, la misma cantidad que ha prometido el Fondo Monetario Internacional (FMI). Además, EEUU, que cuenta con los primeros equipos civiles de respuesta al desastre en Haití, está ayudando junto a Naciones Unidas al Gobierno del presidente René Préval a restablecer la autoridad, las comunicaciones y la seguridad.

Brasil ha puesto en marcha un plan de ayuda a Haití que incluye, entre otros objetivos, la retirada de los escombros, la atención a los heridos y el entierro de las víctimas, ha informado el Ministerio de Defensa, cuyo titular, Nelson Jobim, estuvo ayer en Puerto Príncipe. Brasil es el país que dirige militarmente y que más efectivos tiene en la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH). Según Radio Metropole, unos 3.000 policías y "cascos azules" de la ONU han comenzado hoy a despejar las principales arterias de Puerto Príncipe, a dirigir la circulación y a asegurar la seguridad en el aeropuerto, el puerto y los edificios públicos.

Importante apoyo del país vecino

La ONU ha sufrido en carne propia el desastre con el desplome de su sede en Puerto Príncipe y la muerte de 22 policías y militares de la MUNUSTAH, según ha confirmado el secretario general, Ban Ki-Moon. Además, unos cien trabajadores de Naciones Unidas en Haití están desaparecidos, entre ellos el jefe de la MINUSTAH, Hedi Annabi.

República Dominicana, situado como Haití en la isla La Española, está siendo una pieza importante en el alivio de la situación, debido a que está unido por tierra a ese país. El presidente dominicano, Leonel Fernández, ha visitado la capital haitiana y se ha reunido con su homólogo haitiano, René Preval. Miles de heridos, la mayoría de ellos haitianos, han sido atendidos en hospitales dominicanos tras el terremoto, según una fuente oficial. Además, el Gobierno dominicano instruyó al personal de Migración "para que facilite los trámites a los haitianos y otros ciudadanos que atraviesan la frontera en búsqueda de auxilio".

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