«No me afectan las críticas»

SON las canciones que interpretaba con sus amigos mientras tocaba la guitarra, las que escuchaba Ainhoa Arteta de la voz de su madre, boleros, 'Michelle' de los Beatles, 'Ne me quitte pas' de Jacques Brel o 'La vida' de Silvio Rodríguez, que asimismo da título al disco que acaba de publicar. «He tratado de tomar distancia con la voz lírica y de buscar la tonalidad más apropiada a cada canción. No quería que fuese el disco de una cantante de ópera haciendo música popular», explica la soprano guipuzcoana. El proyecto surgió hace cinco años, pero ella lo aparcó porque no lo veía demasiado claro. «Una carrera lírica exige demasiado esfuerzo y no quería que un álbum de esta clase pudiese sembrar dudas. Ahora ya no me dan miedo las críticas, ni me afectan. Estoy bien posicionada y me preocupo por cantar lo mejor posible, no por el qué dirán», matiza. Clapton, Sinatra... La muerte de su madre hace un año y el apoyo al disco del productor Javier Limón, célebre por su trabajo en el 'Lágrimas negras' de Bebo Valdés y Diego Cigala, ayudaron a que Ainhoa Arteta se decidiera a grabar 'Tears in Heaven' de Eric Clapton, 'Fly Me To The Moon', hecho un clásico por Frank Sinatra y Ella Fitzgerald, 'Love Me Tender' de Elvis Presley y el tema popular vasco 'Goizian Argi Hastian', popularizado por Benito Lertxundi. «Javier me escuchó cantar un día en casa, y me dijo: 'Tienes que grabar eso', recuerda la soprano vasca, que en ese momento interpretaba 'La vida' de Silvio Rodríguez, la canción que tanto escuchaba de la voz de su madre y que el cubano dedicó a su padre, «pensador, campesino y tallador de diamantes», según le definió el miembro de la Nova Trova Cubana. La intérprete subraya que en el álbum hay implícito «un homenaje emocional y sentimental» hacia la persona que le enseñó buena parte de estas melodías, su madre, y que eso le hace sentirse con «ganas e ilusión». «Es un disco de melodías bonitas, de pequeñas joyas que tienen que ver con la vida», considera la cantante. Entre conciertos El álbum se ha grabado entre concierto y concierto, y los recitales que pueda ofrecer con los temas del álbum -ayer dio el primero en el Colegio de Médicos de Madrid- tendrán que colarse en los pocos huecos de su agenda, ya casi cerrada hasta el año 2011, con importantes citas como la ópera 'Cyrano de Bergerac' en Los Ángeles. Del Teatro Real, en el que no ha actuado nunca, sigue sin saber nada. «El problema no es mío, es de ellos. Está clara mi intención de actuar allí cuando me ofrezcan papeles que yo pueda hacer», declara la artista. «No me veía en este mundo» de la música popular», precisa Ainhoa Arteta. Pero una vez dentro de él ha encontrado un «lugar para expresar mi intimidad», señala feliz de haber encarado este nuevo reto.