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GOL. Eto'o corre a por balón, con Amorebieta a su espalda. /REUTER
Eto'o resuelve en un partido sobrio
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Eto'o resuelve en un partido sobrio

Los azulgrana obtienen una victoria sin brillo ante el Athletic en San Mamés El conjunto de Joaquín Caparrós se muestra muy flojo en la parcela ofensiva

SERGI OLEGO

Lunes, 20 de octubre 2008, 04:37

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El Barça solventó su visita a San Mamés con un partido sobrio lejos de la brillantez de anteriores encuentros que le permitió sumar su quinta victoria consecutiva en la Liga. Un solitario tanto de Eto'o fabricado por Henry les bastó a los azulgrana para superar a un Athletic muy flojo en la parcela ofensiva. Entre lesiones y rotaciones el centro del campo azulgrana era irreconocible. El estreno de Víctor Sánchez en partido oficial dejaba coja la línea de creación, sobre todo porque sus acompañantes, Toure Yayá y Keita, no destacan precisamente por su creatividad. Guardiola también tocó el resto de líneas reservando a Messi e introduciendo a Piqué como secante de Fernando Llorente. El técnico catalán temía el estilo directo de los vascos. No le faltaba razón. En veinte minutos dos faltas provocadas por los envíos largos de la zaga local situaban en el disparadero a un Víctor Valdés excelente desviando los certeros disparos de David López y de Yeste. Al Barça le costaba fabricar ocasiones. Para crearlas pasaba de la medular como cuando Márquez le sirvió una buena pelota a un Eto'o hábil en la maniobra que topó con las manoplas de Gorka Iraizoz. El camerunés también cerraría las oportunidades visitantes en la primera mitad con un cabezazo en un córner resuelto con reflejos por el meta vasco. Un par de claras ocasiones por cada equipo era el pobre bagaje de un acto que respondía mejor a los intereses locales. El Athletic era el Athletic. Lucha, capacidad de presión y juego directo en la ofensiva. No pasaba lo mismo en el bando visitante. El Barça no se parecía nada al Barça de Guardiola y la entrada de Sergio Busquets por el lesionado Keita tampoco auguraba alguna mejoría. Aparece Henry El despertar de Iniesta en el arranque de la segunda parte agrupó al Barça en el campo bilbaíno. Dos acciones del 'crack' de Fuenteabilla le daban algo de brillo al duelo, empujando a los 'leones' ante el área de Iraizoz. Un aumento del dominio azulgrana carente de profundidad más propio del retroceso vasco que del criterio visitante. Así que el Barça echó mano de su mayor calidad individual para decantar el partido. Henry se sacó de la chistera una acción de gran clase para asistir a un Eto'o hábil y resolutivo. El Athletic demostró entonces sus deficiencias ofensivas. Joaquín Caparrós removió su banquillo sin éxito. Valdés siguió contemplando desde la lejanía los movimientos locales que se basaban en buscar alguna acción a pelota parada para buscar el empate. Desde la distancia el meta azulgrana comprobó cómo Eto'o malograba la sentencia definitiva en un remate fallido tras una asistencia de Iniesta. Un error del camerunés que no tuvo ninguna influencia en el resultado final por la pobrísima ofensiva local.

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