Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
ideal gente
Viernes, 12 de febrero 2016, 10:41
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Tener un cuerpo 10 para las firmas de moda parece tener un precio, una pesadilla que una de las modelos más demandadas del mundo se ha atrevido a contar. Se trata de Victoire Maçon Dauxerre, una fracesa de 23 años, que fue imagen de varias marcas reconocidas como Alexander McQueen o DKNY, entre otras. La joven sufrió anorexia a raíz de la dura vida de una top model, tal y como ha narrado en su libro, 'Jamás se es demasiado delgada. Diario de una top-model', después de recuperarse y superar una terrible depresión.
Victoire comenzó a trabajar a los 18 años como modelo gracias a que una agencia la captó y le ofreció varios contratos con marcas muy reconocidas, comenzando su práctico suicido, ya que según cuenta su régimen alimenticio era tan estricto que sólo se le estaba permitido comer tres manzanas al días y una vez a la semana pescado o pollo, "Me mataba de hambre para perder 10 kg en un mes. Solo tomaba 3 manzanas al día. Y agua con gas, que llena el estómago. Una vez a la semana me estaba permitido comer pollo o pescado. Nadie me dijo que debía perder peso, pero me dijeron: en septiembre harás las Fashion Weeks, la talla es 32-34 y debes caber. Es en ese momento cuando tendría que haberme ido", aseguraba la joven en las primeras páginas de su libro.
La delgadez extrema de la francesa era tal que llegó pesar 47kg incluso midiendo 1,78 de altura, un físico que aunque la hacía parecer enferma no le impedía desfilar para las firmas, que no tenían en cuenta su situación, "Un médico habría visto que tenía el pulso extremadamente débil, que perdía pelo, que tenía osteoporosis, que no tenía la menstruación. Cuando se tiene el rostro pálido, casi verde, se ve rápidamente que hay un problema"
Maçon actualmente ha superado su enfermedad pero no ejerce la profesión sino que se dedica a luchar contra la anorexia y los trastornos alimenticios en diferentes organizaciones, y su libro es un elemento más de tal pugna contra el sector, "Las chicas que siguen trabajando hoy dirán que miento porque quieren seguir, pero no hablan porque no pueden decir nada: hay una verdadera ley del silencio en este mundo", aseguraba
Sin lugar a dudas este testimonio aviva aún más los alegatos en pro de la belleza natural y sana de la mujer, y no la estereotipada, que en los últimos meses han ido in crescendo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El mapa de los restaurantes con estrella Michelin por provincias
Sara I. Belled y Álex Sánchez
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.