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El regreso de los Antonios

El regreso de los Antonios

Resines y Molero vuelven a formar pareja artística, ahora como «el chorizo y el cura sonado». Solo falta Jesús Bonilla:«Si la serie falla se pone de sacristán»

yolanda veiga

Lunes, 30 de marzo 2015, 11:27

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En la primera cita no quedaron, se encontraron en los butacones del teatro. En el escenario estaba José Sacristán, «Pepe», interpretando a Salieri en Amadeus. Era 1999, cuatro años antes del boom de Los Serrano, la serie que descubrió a Antonio Molero (Ajofrín, Toledo, 1968) y a Antonio Resines (Torrelavega, Cantabria, 1954) como pareja artística. «Después de la función fuimos a tomar algo. Me llamaba por mi nombre y pensé: ¡Qué ilusión que el Resines me conozca...!».

Padre Ángel

  • El humor de su madre 60 años. El humor lo sacó de su madre. Debutó con Ópera prima (1980), de Fernando Trueba, y ha hecho 54 películas. Interpretó a Diego Serrano en televisión entre 2003 y 2008.

  • Presidente de la Academia del Cine. «El cargo me cayó de repente, como cuando te cae una teja, y dije que era un marrón. Fue un pequeño lapsus porque es un honor».

  • Un defecto de Molero.«...Umm. Se está quedando un poco calvo, pero no es un defecto. Mírame a mí, he triunfado calvo y todo. Antonio es muy buena persona».

Acaban de reencontrarse en Aquí Paz y después Gloria, la nueva comedia de Telecinco (martes a las 22.30 horas). «¡Hemos hecho tantas tonterías juntos...!». Y las que quedan, porque entre el boxeador sonado metido a cura y el estafador camuflado bajo el hábito... «El miercoles, al día siguiente del estreno, fui al hospital a que me echaran un vistazo a la pierna, que tengo una pequeña avería en la rodilla, y la gente me gritaba: ¡Padre Ángel! Iba con abrigo y me decían a ver si llevaba dejado el cleriman. ¡Se cachondeaban! También me saludaban muchas personas por el barrio, eso es un buen medidor de audiencia», asegura Resines. Por cierto, que lo del abrigo, más bien la chaqueta, es una de sus señas de identidad, se burla Molero. Y rescata una anécdota que no estaba en el guión: «Lo de la chaqueta es grandioso, hay que convencerle para que se la quite, será que se siente seguro. Una vez estábamos grabando una escena de Los Serrano en el desierto de Marrakech. Habría cuarenta grados por lo menos y yo estaba subido encima de un camello. Él tiraba del animal ¡y llevaba la chaqueta puesta! Al poco coincidimos con Manu (Imanol Arias), que le conoce bien y nos dijo que se partió de risa cuando le vio así por la tele».

Los Antonios se han encontrado de casualidad, que Molero iba para futbolista «jugué hasta juveniles en el Avance, un equipo de Alcalá de Henares» y Resines para abogado «abogado defensor, que soy un hombre débil» como su padre. Empezó primero, repitió, se quitó de la cabeza lo del Periodismo, que también le rondaba, y encontró su sitio en el cine. Su compañero le recuerda en La buena estrella, «cuando está sentado en la oscuridad, en silencio, y sabe que le están poniendo los cuernos. Ese carnicero que él interpretaba era una persona tan normal...». Se llamaba Rafael y por ese trabajo ganó Resines el Goya en 1997. «El día que nos conocimos estuvimos hablando de muchas películas y de lo que dijo cuando le dieron el premio: Ni era tan malo antes ni soy tan bueno ahora. Eso dice mucho de la forma que tiene Antonio de tomarse la profesión».

Padre Julián

  • 'El Poli' 47 años. Se hizo popular con el personaje del Poli en Médico de familia (Telecinco 1995-1999). Ha trabajado en 18 obras de teatro y en 10 películas.

  • Una virtud de Resines. «Es un tipo muy normal y muy buen compañero porque trabaja mucho por las condiciones laborales. Tiene muy en cuenta no pasarse de la hora, es como tener un enlace sindical en el plató. Lo lleva a rajatabla y el equipo le adora».

  • Su personaje «Me encanta que no se entere de nada, es muy ingenuo y, al mismo tiempo, impulsivo».

Un monaguillo «de sport»

Y el rodaje de Aquí Paz y después Gloria se lo están tomando a risa, en sentido literal. «Si te fijas en mis escenas estoy un paso por delante de Molero y en las suyas me quedo un poco atrás. Acordamos hacerlo así porque cuando estábamos al lado y nos veíamos actuando nos daba tanto la risa que había que repetir muchas veces».

¿Quién es más gracioso?

Molero: En el día a día te ríes más con él que conmigo. Es más payaso, está siempre de broma, yo soy menos extrovertido.

Resines: Molero, Molero es más gracioso, cuenta muy bien las anécdotas. Yo hago más el tonto.

Molero, cuando se pone, también, y con el cura Julián ha encontrado un filón. Para preparar el personaje vio combates y películas de boxeo... y dio con el tic, ese movimiento de cabeza que, augura Resines, «se va a poner de moda». «En el guión le indicaban que su personaje estaba un poco para allá y que tenía un tic. El director le dijo que se hiciera más el sonado y en cuanto empezó a mover la cabeza como los boxeadores al calentar nos reímos todos mucho. A mí me hace mucha gracia cuando se da cabezazos contra la pared, es chocante».

¿Y la Conferencia Episcopal qué dice, están contentos?

Resines: Nos ha felicitado. Parece que estamos fomentando las vocaciones (risas).

¿Se acuerda del párroco de su iglesia?

Resines: Yo iba a un colegio de religiosos y ayudaba en misa; era una especie de monaguillo, pero vestido de sport. Del único cura que me acuerdo es de uno que me pegó una vez una bofetada.

El sacerdote que interpreta en la serie de Telecinco es en realidad su hermano gemelo, Paco, «un jeta que cae simpático».

¿No somos demasiado permisivos con los jetas?

Resines: Sí, sí, pero jetas son los que roban de una forma descarada y no voy a dar nombres que los conocemos todos. Este es solo jetilla, de los que roba el cepillo de la iglesia. En el fondo es un desgraciado, un pobre hombre.

Este personaje fue el origen de Aquí Paz y después Gloria, una serie que Telecinco tuvo dos años en barbecho y mandó cambiar después de ver el episodio piloto. Originalmente no aparecía Molero, que se incorporó después como el padre Julián. Le llamó Resines «era una baza» y el otro aceptó encantando. «Habíamos estado siete años sin currar juntos, pero cuando nos vimos en el plató parecía que no había pasado ni una semana. Ha sido impresionante».

«En pelotas» por la calle

Como Diego Serrano y Fiti en Los Serrano, que Telecinco emitió con gran éxito durante 5 años.

Como Diego Serrano y Fiti en Los Serrano, que Telecinco emitió con gran éxito durante 5 años.

Otra vez mano a mano, pero les falta uno, Jesús Bonilla, el tercero de Los Serrano. Resines quería meterlo, pero los creadores de la serie se resistieron a repetir la fórmula. «Es imposible dejarle fuera de todas estas aventuras que hemos vivido en los rodajes. Si en Los Serrano ya era todo un disparate, el que le daba el punto mas disparatado era Bonilla. A mí me hacía mucha gracia el pique que tenían ellos dos. Bonilla le decía: ¡Interpreta Resines, interpreta! y el otro le respondía que se fuera a tomar... Así andaban todo el día».

¿Les ha perdonado Bonilla que esta vez no cuenten con él?

Molero: Sí, sí. El otro día me mandó un mensaje: Si la serie se viene abajo me pongo allí con vosotros de sacristán (risas).

El estreno lo vieron casi 3,7 millones de espectadores y anotaron el 20% de share que pronosticó Resines. «Me decían que estaba zumbado, pero si hacemos un par de semanas buenas, seguiremos». Él está «encantado de volver a estudiar», que lo tenía medio abandonado desde el final de Los Serrano (2008). «Aquel personaje nunca me pesó, pero el tiempo sí. Estaba agotado, no tenía vida porque me pasaba todo el día estudiando los guiones y no me cabía más en la cabeza».

Molero también sufrió y disfrutó de ese atracón de fama que les dio a ambos la serie, aunque el susto se lo llevó antes, con Médico de familia, con el personaje de Hipólito. «Me costó trabajo asimilar la dimensión de la tele. Salía a la calle y tenía la sensación de estar en pelotas con todo el mundo mirando».

E éxito de Aquí Paz y después Gloria ha confirmado a este par de Antonios como dos imprescindibles de la comedia española. Juntos «cuanto empezamos a trabajar nos dimos cuenta de que había que aprovechar ese feeling y la química que teníamos» y por separado. Porque no todo lo entonan a dúo. Resines es «muy del Real Madrid» y a Molero su padre le contagió la afición rojiblanca por el Athletic de Bilbao. «Me acuerdo de Dani, de Iribar... Cada vez que pierde el Madrid con el Athletic le meto caña. Antonio es socio y va al campo». Forofo, pero «con muy buen perder, ¿eh?».

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