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El desierto de Tabernas marca el inicio del ascenso a la parte final de la prueba, con Velefique y Calar Alto como los puntos más atractivos de la jornada. EFE
Las estrellas se acercan a Calar Alto
Ciclismo

Las estrellas se acercan a Calar Alto

El pico más alto de los Filabres alberga la llegada de la Vuelta Ciclista a España por tercera vez

JUANJO AGUILERA

ALMERÍA

Miércoles, 30 de agosto 2017, 00:38

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Acostumbrados a tener que utilizar telescopios, algunos como el de 3,5 metros cuyo peso es de 430 toneladas, Calar Alto tendrá hoy las estrellas tan cerca como en las anteriores dos veces en las que la Vuelta Ciclista a España ha pisado las cercanías del Centro Astronómico Hispano-Alemán que corona el pico más alto de la Sierra de los Filabres. Puede que este año con la presencia de un corredor de la talla de Chris Froome, que pasa por ser un auténtico 'tiburón' en la bicicleta y el ciclista con más 'quilates' del actual pelotón que disputa la edición de 2017 de la ronda española.

El citado enclave acoge la llegada de la Vuelta Ciclista a España por tercera vez en su historia. La primera etapa tuvo lugar en 2004. Almería estaba inmersa en el proceso de promoción de los Juegos Mediterráneos de 2005 y se apostó por una etapa que nació en la capital almeriense para finalizar en Calar Alto. El español Roberto Heras, del equipo Liberty Seguros, consiguió el triunfo en la duodécima etapa de la 59 edición de la Vuelta Ciclista a España, con un recorrido de 145 kilómetros, el día 16 de septiembre de 2004. Dos años después, tras quedar 'prendados' del recorrido, la ronda repitió final de etapa. El corredor español Igor Antón, del equipo Euskatel, se adjudicó la decimosexta etapa de la 61 edición Vuelta a España, con un recorrido idéntico, de 145 Kilómetros, que también nació en la capital almeriense.

Sin embargo, de esta etapa de hoy de la Vuelta Ciclista a España no sólo destaca el hecho de acabar en un pico de 2.168 metros de altitud -el segundo más alto de La Vuelta, tras el del final de etapa del domingo en Sierra Nevada-. El entorno descubierto para la Vuelta de 2004 sigue siendo motivo de 'santuario' del ciclismo porque transcurre, en sus últimos kilómetros, por los mismos parajes por los que transitó aquella primera visita y la segunda. Sólo cambió un poco la de la tercera vez, en la que la ronda concluyó en Velefique, a donde se ascendieron dos veces, sin pasar por Calar Alto, pese a que la organización colocó ese como lugar de paso, cuando en realidad fue el Collado Venta Luisa la cima señalada como de primera categoría.

Entre Galibier y Alpe D'Huez

Un nuevo paraíso para el ciclismo y también para Almería. La Vuelta descubrió en 2004 entornos especiales en una zona con no mucho protagonismo hasta ahora que, seguramente, sí verá recompensado el esfuerzo económico que ha supuesto traer al pelotón de la ronda española hasta la comarca de la Sierra de los Filabres. Un nuevo paraíso para el ciclismo y también para Almería. La Vuelta descubrió en 2004 entornos especiales en una zona con no mucho protagonismo hasta ahora que, seguramente, sí verá recompensado el esfuerzo económico que ha supuesto traer al pelotón de la ronda española hasta la comarca de la Sierra de los Filabres.

Miles de aficionados al deporte del pedal verán hoy la prueba, algo que es posible porque eligiendo alguno de los muchos puntos estratégicos de la ruta se puede ver casi íntegra la ascensión al Alto de Velefique, un lugar especial donde puede empezarse a ver la batalla entre los grandes aspirantes a ganar la etapa, además de ver la posibilidad de 'apuntalar' las aspiraciones al maillot rojo.

Los últimos kilómetros de carretera son visibles desde Velefique, por ese enclave y esa carretera con 'mil herraduras' que permite ver el transcurrir del pelotón y que se convierte, sin duda, en la mejor y mas barata plataforma publicitaria de la carrera. ¿Se imaginan cuánto vale un anuncio de más de cuatro horas de duración que llegue a todos los hogares de España y de otros muchos en el mundo? La respuesta tendría muchos ceros en cuanto a su valoración.

Lo verde...

Además, es la posibilidad de volver a conocer un entorno que tira por tierra eso de que lo verde empieza en los Pirineos. La celebración de una de las grandes etapas de la Vuelta Ciclista a España sirve para dar a conocer otros paisajes de una Almería con el 'cartel' de desértica colgado desde hace muchos años. Aunque se disfrutará del desierto que hicieron famoso los spaghetti western de Clint Eastwood y compañía, pasado Tabernas se entra en un 'multicolor' paisaje de la provincia y sus diferencias climatológicas.

De hecho, la zona amenazaba lluvia durante toda la jornada, por lo que quienes se acerquen deberán acordarse que la temperatura puede no llegar a los 20 grados y quienes suban deberán olvidarse la camiseta veraniega y el pantalón corto y llevar ropa para resguardarse del frío, para equilibrar los contrastes de una provincia que tiene muchos. Se está ante la posibilidad de ver imágenes de cine y muy valorada por muchos de los que no quieren dejar pasar la oportunidad de vivir in situ la prueba.

Hay quienes ya lo vivieron en anteriores ediciones y que comparan. Ciertamente, son puertos de montaña altos, pero largos y se mitiga un tanto la fatiga, pero también hay que tener en cuenta cómo hagan los corredores la carrera. Los aficionados que 'viven por y para la bicicleta' y que han vivido etapas del Tour o del Giro, hablan de Velefique, por ejemplo, de una ascensión parecida a la del Galibier en cuanto a las formas del trazado, casi esculpido en la montaña, si bien Velefique te permite ver más cosas, se ve la carrera desde incluso el pequeño llano antes de comenzar el puerto.

Lo que sucede es que el entorno perjudica la presencia de aficionados. Algunos ya dormían anoche para elegir el mejor lugar de la carrera y menos mal que no es sábado, como pedían muchos. Un vecino de la zona decía ayer que «si es así, esto revienta de gente, claro que también se producirían más problemas por no contar con mucho espacio para aparcar. De todas formas, esto es vida para la comarca, más allá de lo que pueda dejar la etapa». De hecho, muchos apuestan por recorrer el entorno y emular a los Froome, Contador, Aru, Van Garderen, Luis León o Nibali. Por cierto, que el ganador de 2006, Igor Antón también está enrolado en las filas del Dimesion Data.

De todas partes

Se podría decir que un 50% de los que se den cita en el entorno serán de la provincia de Almería y la otra mitad proceden de otras provincias o de otros países. Franceses, belgas e italianos los que más, algunos llegados en bicicleta, otros tomando como punto de partida para realizar su particular 'gesta' desde Tabernas para coronar arriba, pasando, eso sí, por la ya 'curva de Hesjedal', que es como se llama desde 2009 la primera de las 21 de que consta el Alto de Velefique por el triunfo del canadiense entonces.

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