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La consejera andaluza, María Jesús Montero, conversa con el conseller catalán, Oriol Junqueras, durante el CPFF del jueves.
La Junta afloja el enfrentamiento con Montoro a la espera de avanzar en financiación

La Junta afloja el enfrentamiento con Montoro a la espera de avanzar en financiación

Los 150 millones adicionales del déficit no se adjudicarán hasta que Hacienda comunique las entregas a cuenta

LALIA GLEZ.-SANTIAGO

Sábado, 3 de diciembre 2016, 01:30

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Andalucía suavizó su habitual pugna con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del pasado jueves. La consejera andaluza, María Jesús Montero, se abstuvo en la votación final sobre el nuevo objetivo de déficit y batalló sobre todo por que se agilice de una vez la reforma del sistema de financiación, que Andalucía considera que le perjudica hasta el punto de perder mil millones al año. La consejera andaluza compartió mesa con el conseller catalán, Oriol Junqueras, comunidad cuya reclamación mantiene en ascuas a las autoridades andaluzas, que han declarado que se mantendrán vigilantes ante cualquier trato discriminatorio.

Tras el compromiso del Gobierno de convocar la Conferencia de Presidentes en enero y abordar ahí el nuevo reparto del dinero a las autonomías, la Junta optó por rebajar su oposición, además de valorar que la décima de más conseguida para 2017 le supone un respiro.

Fuentes de la Consejería indicaron que la reunión fue dura y que cada región defendió su posición en función de sus objetivos de déficit, de modo que las más desviadas votaron en contra por hallar mayores dificultades para cumplir el 0,6% al término del ejercicio. Fueron las comunidades habitualmente disidentes, Cataluña, Valencia y Baleares, las más endeudadas.

Fuentes de la Junta no vincularon la votación con razones políticas, derivadas de las conversaciones mantenidas entre PP y PSOE para que este partido apoye el techo de gasto, sino estrictamente contables.

Con todo, las diferencias de fondo persisten. Bruselas ha facilitado un margen del 1,2% al Reino de España, pero el Gobierno ha dado solo una décima a las autonomías, reservándose el 1,1% restante. No es un ningún regalo, dijeron estas fuentes, pero el «oxígeno» viene bien. No se votó en contra, pero tampoco a favor, ya que Andalucía mantiene su oposición a la nueva senda, que establece un 0,6% para 2017, un 0, 3% en 2018 y 0,0% en 2019, porque el Gobierno central se da a sí mismo un año más de margen, 22020, para lograr el equilibrio, pero exige a las comunidades conseguirlo un año antes.

La Junta andaluza reclamó sin éxito que Hacienda premie a las comunidades más cumplidoras, como incentivo para aumentar el esfuerzo.

Por último, la delegación andaluza se vino de Madrid sin conocer las entregas a cuenta. El ministro incluso indicó que no se sabrán hasta que no haya Presupuesto, en lo que se interpreta como un nuevo elemento de presión hacia los 'barones' socialistas para que accedan a apoyar las cuentas públicas.

Andalucía defiende que las entregas a cuenta tenían que haberse dado a conocer en julio y no hay ninguna razón para no hacerlo. Hasta tanto no estén en poder de la Hacienda regional no se decidirá el destino de los cerca de 150 millones de euros adicionales que va a suponer para el gasto andaluz la décima de más conseguida en el CPFF. Montero habló de «prudencia». Habrá pues que esperar a ver cómo se comportan las entregas a cuenta para ver si hay margen para más gasto e inversión.

No obstante, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, avanzó que estos 150 millones más «se podrán destinar a Educación, Sanidad o Dependencia». Díaz valoró la décima conseguida , así como la modificación de la regla de gasto, ««injusta», que obliga a que muchos ayuntamientos que tienen superávit «tengan que tener sus recursos en el banco y no puedan destinarlo a mejorar inversiones e infraestructuras». Sobre todo, defendió el 8% del SMI, con una lectura en clave de partido: es decir como un logro de la oposición socialista para «acabar con las políticas dañinas del PP».

Mientras, el coordinador general de IU Andalucía, Antonio Maíllo, pide que este dinero extra se destine «exclusivamente» a políticas de sanidad y la coordinadora general de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, criticó que la Junta haya aceptado esta décima de rebaja del objetivo de déficit, por considerarlo un «alivio absolutamente insuficiente» .

Hacienda por su parte sacó pecho tras las críticas recibidas por haber confeccionado el Presupuesto con el 0,5% y defendió su «prudencia y realismo».

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