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Pantoja, en una fotografía de archivo saliendo de los juzgados malagueños
Los argumentos que esgrime Isabel Pantoja para eludir la prisión

Los argumentos que esgrime Isabel Pantoja para eludir la prisión

La defensa rechaza en su solicitud de suspensión de la pena la «peligrosidad criminal» de la cantante y que haya cometido actos de corrupción

juan cano / álvaro frías

Viernes, 31 de octubre 2014, 12:55

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El futuro de Isabel Pantoja se decide estos días entre la tercera y la cuarta planta de la Ciudad de la Justicia de Málaga. La Fiscalía Anticorrupción remitirá en breve a la Audiencia Provincial el informe con su postura respecto a la solicitud de la tonadillera, que pide que se le suspenda la pena de dos años de prisión y el pago fraccionado de la multa tras hacer un primer ingreso de 100.000 euros. A partir de ahí, será la Sección Segunda la que tendrá que tomar una decisión sobre si le concede o no ese beneficio.

Pero, ¿cuáles son los argumentos que esgrime la cantante para eludir la cárcel? Su defensa, que ejercen al alimón los abogados José Ángel Galán y Graciela Otondo, los resume en cuatro puntos. El primero y el principal es que Pantoja cumple los requisitos que recoge el artículo 81 del Código Penal para que se suspenda su ingreso en prisión y se le otorgue la remisión condicional: carece de antecedentes penales, su condena no supera los dos años y no conlleva responsabilidad civil. Sin embargo, la concesión no es automática, sino que queda a criterio de los jueces.

Antes de tomar cualquier decisión, el tribunal está obligado a consultar al Ministerio Público (su opinión no es vinculante, pero sí tiene un peso específico), respuesta que aún espera la tonadillera. En el caso Pantoja, la Fiscalía ya se ha pronunciado sobre este extremo respecto a otro de los condenados, el exdirector de banco Benjamín Martínez Cantero, que pidió la suspensión de una pena de un año y seis meses. Anticorrupción se opuso a concederle la remisión condicional por la «peligrosidad criminal» del sujeto entendida por la falta de arrepentimiento, que a su juicio no ofrece suficientes garantías de que no vuelva a delinquir y por la «función ejemplarizante» y de «prevención del delito» que cumplen las condenas. Para la fiscal María del Mar López-Herrero, que se encarga del caso, el blanqueo derivado de la corrupción es también corrupción.

En su escrito, la defensa de Pantoja trata de rebatir estos argumentos. Los letrados sostienen en su solicitud que la cantante no cometió «actos de corrupción», que «en todo caso» matizan serían achacables al que fue su pareja, el exalcalde de Marbella Julián Muñoz, también condenado en esta causa. «En cualquier caso, su intervención (la de Pantoja) sería posterior al delito», insiste José Ángel Galán.

Ni la Audiencia ni el Tribunal Supremo opinan lo mismo a juzgar por la sentencia, que ya es firme. «[Pantoja] era conocedora de que el dinero de su pareja, de la que se separó en junio de 2003, procedía de actos delictivos directamente relacionados con su actividad política como concejal y alcalde Marbella», según recoge la resolución judicial.

Los abogados de la tonadillera también rechazan la alarma social, que consideran un «concepto caduco, propio de regímenes totalitarios», y la peligrosidad criminal. «Se trata de una profesional de reconocido prestigio en su trabajo con arraigo en España y que, además, es solvente», explica Galán. Lo dice para avalar la segunda parte de la solicitud de la tonadillera: el pago fraccionado de la multa que es de 1.147.148 euros en cuotas trimestrales de 210.000 euros, aunque prometen que su deuda con la Justicia se saldaría antes si consigue vender alguna de sus propiedades, actualmente trabadas por los embargos.

La defensa de Pantoja aún intenta exprimir otra baza, que sería el cuarto argumento de su solicitud. El abogado José Ángel Galán asegura que el Constitucional ya ha admitido a trámite el recurso de amparo que presentaron contra la sentencia, por lo que entiende que se debería paralizar la ejecución de la condena hasta que este tribunal se pronuncie. Entre tanto, es la Sección Segunda de la Audiencia quien tiene la palabra.

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