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El escultor de Arboleas, Luis Ramos, junto al alcalde de Zurgena y un trabajador delante de la escultura del famoso artista mejicano.
'Transmutación', la escultura olvidada del mejicano Jorge Elizondo, luce ya en Zurgena

'Transmutación', la escultura olvidada del mejicano Jorge Elizondo, luce ya en Zurgena

La figura, del reconocido artista, es fruto de un evento cultural comarcal que ha sido rescatada para disfrute de los vecinos y visitantes

ELOÍSA BENÍTEZ

Domingo, 29 de marzo 2015, 01:35

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Hace trece años, durante dos semanas del verano de 2001 (9 al 22 de julio), se desarrolló en Zurgena el I° Foro Cultural Crearte. Tras varias entrevistas del entonces concejal, José Juan Ramos, con el artista de Arboleas Luis Ramos, surgió la idea de crear un proyecto cultural comarcal y provincial, inicialmente ubicado en Zurgena. Con la entonces alcaldesa María del Mar Simonelli y el apoyo de la Diputación Provincial de Almería representada por la diputada Ana Toro, se realizó el I° Foro Cultural Crearte.

El encuentro trató de artes plásticas y cultura en general, actividades como la realización de una escultura, un taller de pintura dirigido a niños y jóvenes, un recital de poesía, una exposición de escultura y pintura, un concierto musical; iniciativas que vibraron en los espacios de la antigua estación de Renfe en la Alfoquía.

La escultura fruto de aquel evento cultural se ejecutó en mármol blanco del Tranco, obra del escultor mexicano, Jorge Elizondo, artista de reconocido prestigio internacional. La obra se titula 'Transmutación' y pertenece a una serie que el autor denomina Frágil. Según el propio escultor «se trata de una obra que habla del proceso que sufrimos los seres humanos cuando nos aplicamos a la cultura, a la realidad en que vivimos».

Un arco de medio punto comunica la parte más tosca, la que tiene textura de corte de disco con trozos de piedra viva al natural, con la parte más elaborada en la que aparece como un paño doblado, plegado y labrado a gradina. La parte desordenada, caótica, entra por el arco y cambia, se transforma, aparece por el otro lado con el orden y la armonía de una prenda ya tejida y manufacturada.

«Creo sinceramente que es una buena brújula para los momentos que estamos viviendo. Lejos de lo que algunos sectores opinan, la educación artística nos ofrece una herramienta de cohesión y unión, que lejos de distraer, permite e impulsa la atención creativa, genera conciencia y como consecuencia aporta vitalidad a la renovación humanística y espiritual», explica el escultor de Arboleas.

«Quisiera resaltar la relevancia de la escultura así como la de su autor Jorge Elizondo, al que conocí por los años ochenta, cuando él visitaba la ciudad de Pietrasanta en la comarca del mármol de Carrara (Italia), ciudad donde yo me encontraba disfrutando de una beca de la Junta de Andalucía. Surgió una buena química, quizá porque los dos procedemos del mundo científico (él es ingeniero y yo matemático). Tras una pausa de una década sin vernos, retomamos el contacto a finales de los noventa, hasta principios del 2000 cuando le propongo participar como artista invitado en el 1° Foro Cultural Crearte», añade Ramos.

El escultor arboleano explica que durante la primera década del 2000 compartieron varios simposiums de escultura y otros eventos en España y en México, hechos que aumentaron su relación y amistad. «Todo esto me hizo regresar en varias ocasiones a ese hermoso país y vincularme artística y humanamente con México», puntualiza.

El artista no olvida su agradecimiento al ayuntamiento de Zurgena por su actitud a la hora de recuperar esta obra y también recobrar la memoria del primer Foro Cultural Crearte. «Resulta un buen ejemplo que las autoridades se sientan comprometidas y responsables con la sensibilidad intelectual y artística», finaliza el escultor del Almanzora.

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