¿Cómo ha sido la Semana Santa de Almería?

Ahora que hemos puesto punto y final a la semana de Pasión, ahora que podemos mirarla con algo más de perspectiva, y a pesar de que me falta mucha información de esa que irá apareciendo por los mentideros cofrades a lo largo de estos días, llega el momento de hacer una valoración, de repasar todo lo que ha dado de sí y de llevarse así el último regustillo cofrade que ya sólo alimentarán los vídeos y las fotos hasta que las Glorias vuelvan a llenar de incienso las calles de la ciudad.

Voy a empezar por mi trabajo y voy a tener que pedir disculpas porque no he estado a la altura. Este año, aparte de las crónicas, también he sido responsable de las fotografías que han ilustrado estas páginas y, como dice el refrán «quien mucho abarca poco aprieta». He hecho fotos decentes, sí, y he escrito crónicas decentes, también, pero ni en un caso ni en el otro he alcanzado el nivel que sé que puedo dar y que ustedes se merecen. Tomo nota para el año que viene.

Quiero que sepan que el Ayuntamiento se lo curra más de lo que creemos en Semana Santa. En estos días he acompañado cada mañana a la concejal de cultura, Ana Martínez Labella, y a la presidenta de la Agrupación de hermandades y cofradías, Encarnación Molina, a visitar a las hermandades que salían en procesión y les aseguro que he visto a la concejal resolviendo problemas conforme se los planteaban.

Valgan como ejemplo los focos de la plaza de San Roque que, el Miércoles Santo por la mañana estaban rotos -por el vandalismo callejero- y, tras demandarlo y esa misma tarde, estaban reparados y reorientados para que la Hermandad del Calvario hiciera su primera salida en los días santos como se merece.

Seguridad

Y eso es sólo un ejemplo, otro podrían ser los camiones que, cada día, se han colocado estratégicamente en diversos lugares del centro de la ciudad y cuya misión ha sido la de ser parapetos contra camiones locos de los que conducen los insensatos que matan en nombre de Dios. Sí, a eso hemos llegado, a que una ciudad tan tranquila como Almería tenga que protegerse en un nivel 4 de alerta terrorista porque, con la mierda de la globalización, ya nadie está a salvo de nada.

Gracias Ramón, gracias por vuestra preocupación y vuestro trabajo. Haz extensivo este agradecimiento a todas las áreas implicadas y, en ellas, hasta al último de los técnicos y trabajadores municipales.

¿Que qué les digo de las cofradías? Pues que ha habido de todo. Lo repasamos en un segundo, si les parece bien.

A la Borriquita no le pongo un pero en su desfile, pero sí que les hago un apunte sobre su futuro: no sois una hermandad de barrio, ese no es vuestro camino, sino que sois una hermandad de niños. Trabajad los colegios durante todo el curso. Y no sólo los del entorno de Altamira, sino todos. Eso asegurará un cortejo numeroso y una cantera de hermanos que perdure en el tiempo.

En la Cena, según me dicen, el cambio a una igualá general ha sido bueno y los costaleros lo han notado. Enhorabuena por seguir dando pasitos que os hagan grandes. Luego, cuando os hacéis cofradía, Almería lo agradece.

Los Ángeles son grandes de arriba a abajo. Igual es amor de vecino pero muero con ellos. Y pido perdón a la Hermandad de la Estrella por no haber tenido tiempo de disfrutar con ellos. Vuestra crónica de este año es una de esas espinas que se me han quedado clavadas. Os debo una.

Lunes Santo

El Lunes Santo a Macarena, a pesar de haberme conquistado con su salida, les habría matado con el pasodoble de marras. Da igual que tenga un significado, que esté elegido con mimo y con otros mil argumentos que lo justifiquen; Almería no está preparada para estas cosas y la madre de Dios no se lo merece. Así de sencillo.

A Pasión y a Gran Poder les vino a deslucir el encontronazo de la plaza Circular. Dejando a un lado el mal gusto con el que, los responsables, abordaron el asunto, que una fuera con adelanto no es justificación para colarse sin saber si tendrán tiempo de pasar y, que la otra tuviera preferencia de paso, tampoco justifica que montaran el taco para luego detenerse en Rivera de las Almadrabillas a comerse el bocata.

Sé que, a toro pasado, es muy fácil encontrar soluciones y alternativas pero tampoco cuesta nada actuar desde la calma. Es nuestra propia imagen y nuestra credibilidad la que está en juego y eso no debemos olvidarlo.

Martes Santo

Llega el Martes Santo y yo tengo que pedirle perdón a la familia Mingorance, de la Hermandad del Amor, porque están trabajando mucho por la hermandad y ni me acordé de ellos al escribir la crónica. Me preocupa la Semana Santa de 2018, porque la cuadrilla de la Virgen sigue teniendo lo suyo y la mitad de los de este año se guardarán las fuerzas para su día. Pero, como le dije a Rafa, el capataz del Cristo, si de algo sabe esta hermandad es de milagros bajo sus pasos. Sé que todo irá bien, pero no relajarse.

Del Perdón destacar que fueron brillantes, como cada año, y a Coronación agradecerles su esfuerzo para cruzar las grandes avenidas. La globalización y los problemas que conlleva, es lo que tiene. Ya lo he dicho antes.

Miércoles Santo

Hay quien dice que Prendimiento sigue teniendo un tiempo de paso demasiado largo y que aburre. Yo la vi salir en cuarenta y cinco minutos de la Catedral y, con tres pasos, me parece hasta rápido. A ver si tenemos por ahí un topicazo de los que no nos hacen falta.

A los hermanos de Estudiantes decirles que ni los buenos son tan buenos ni los malos son tan malos. La crisis interna no ha deslucido vuestra mágica noche de Miércoles Santo pero ha puesto en evidencia que, al menos, os falta una charla.

Y, el Calvario, cuenta con mi aprobación pero hay quien cree que, lo que vimos, fue un espejismo. Bienvenidos a los días santos y apretaos los machos para el año que viene. Que seréis cuatro.

Jueves Santo

Felicidades a los hermanos del Rosario del Mar por la adquisición del paso de misterio. Poquito a poco estáis demostrando que era vuestra hora.

Enhorabuena al Encuentro por formalizar y darle seriedad a un acto que, aunque haya quien lo tache de pueblerino, es identidad de Almería y de la hermandad. Y la identidad no debe perderse nunca.

Angustias no sé dónde tiene el techo, si es que lo tiene y, Silencio... Silencio lleva años jugando en otra liga. Su manera de evangelizar es tan incuestionable como evidente.

Me dicen que el paso de misterio de la Caridad no tiene al mejor capataz. Yo no valgo para juzgarlo porque soy incapaz de hacer lo que hacen los capataces pero, por lo extendido que está el comentario, dice el refrán que «cuando el río suena, agua lleva». Igual se debe abordar el tema en el seno de la hermandad. Pero, por favor, que no se haga como en otras hermandades.

La Soledad no tiene peros. Bueno sí, sólo uno aunque no depende de ellos. ¿Para cuando una coronación canónica de esta imagen que es la Madre dolorosa de Almería?

Y, el Santo Sepulcro... El Santo Sepulcro es la justificación para trasladar al señor obispo el hartazgo de los cofrades almerienses. No mate al mensajero, don Adolfo, pero sepa que se está ganando un cisma y, por lo que sé, con razón.

Resurrección

Que la Gracia del Domingo de Resurrección inunde siempre nuestros corazones y mantenga en nosotros la ilusión, la esperanza y las ganas de trabajar que tienen los hermanos del Resucitado. Que su tesón y paciencia sean contagiosos pues, con ese espíritu, es con el que los cofrades almerienses podremos defender el lugar que reclamamos y con el que podremos trabajar para lo único que nos debe mover realmente: alabar a Dios y a su santísima Madre.

Gracias y un fuerte abrazo por vuestra paciencia y cariño. Espero que volvamos a vernos en 2018.

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