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INMACULADA ACIÉN
Sábado, 29 de agosto 2015, 01:27
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Tortugas, aves de distintas especies, jerbos y cobayas tomaron en la mañana de ayer la Caseta Infantil Municipal en el XX Concurso de Mascotas Ciudad de Almería. Una gran cantidad de familias participaron ayer en esta actividad, en la que los niños fueron de asombro en asombro ante la gran variedad de especies animales. De bien seguro que durante las próximas semanas será más de un padre al que le tocará escuchar constantes peticiones para aumentar la familia con un original animal. En total, el concurso se dividió en dos categorías, como fueron animales domésticos y animales exóticos, con 29 y 13 inscritos, respectivamente. Durante unas dos horas, dueños y animales desfilaron por el escenario de la caseta para mostrar al jurado a sus pequeños amigos y algunas de las originales acciones que llevan a cabo.
La opción de adoptar
Cristóbal Miranda, propietario de Joe, explicó que lo adoptó hace un año y medio, y se confiesa un enamorado de los animales. De hecho, en casa esta gran tortuga convive con cinco gatos, dos perros y una cobaya. «Siempre he tenido animales en casa. Todos son adoptados bien a través de conocidos o de la protectora, y todos se llevan muy bien, se respetan y dan mucha vida», explicó Miranda.
Sin embargo, no fue esta tortuga la única que acaparó los flashes de los asistentes, otro de los que atrajo la atención de mayores y pequeños fue el guacamayo Curro, de Manuel Bolea. «Lo tengo desde enero y tiene un año. La primera vez que vi este animal tenía 13 años, pero no podía comprarlo y ahora con 22 he podido cumplir mi suelo», confesó este joven almeriense que participó por primera vez este año. Asimismo y como muchos de los participantes, su pasión por los animales le ha llevado a contar actualmente con entre 50 y 60 aves que viven en semi libertad. «Me declaro un loro adicto», comentó entre risas, al tiempo que señaló que suele dedicarles entre 2 y 3 horas al día a sus cuidados, excepto en el caso de Curro que vive con él
Por otra parte, muchos niños quisieron participar en el concurso con sus mascotas, como Carmen Belén Díaz que concursó con su chinchilla Yaki, que tiene desde hace dos años y al que definió como «un animal muy dócil y manso», o su hermano Antonio Díaz, con Iván, un petauro del azúcar bebé, que hace tan sólo un mes abandonó la bolsa de su mamá. Por su parte, Ana Belén Fajardo fue acompañada de su dragón barbudo Copito, en cuyos cuidados colabora, y que es uno más de los muchos que aseguraron tienen en casa.
Tampoco faltaron, entre otros, camaleones, cacatúas, hurones, agapornis, erizos africanos, gatitos o cobayas de distintas razas, como las cobayas Skinny de Juan Carlos Hernández. «Me encantan las cobayas y tengo 18 por lo menos. Las que he traído al concurso no tienen pelo, por lo que son ideales para los niños con problemas de alergia».
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