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JAVIER GARCÍA MARTÍN
Miércoles, 26 de noviembre 2014, 00:24
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El de la imagen es el primer cuerpo que sale a la luz en el cementerio de San José y Santa Adela procedente de la época de la postguerra, tiempo aquel en el que los ejecutores del régimen que salió vencedor de la Guerra Civil represaliaban a los almerienses que se habían declarado leales a la causa republicana e inhumaban en fosas comunes sus cadáveres.
Este martes, el equipo de arqueólogos que trabaja en el cementerio capitalino a expensas de la Junta de Andalucía celebró el hallazgo de este primer esqueleto en la fosa 132, donde creen que aguardan a ser descubiertos los restos de los fusilados Torcuato Ortega -último alcalde republicano de Gádor- y Francisco Alcaraz. Sin embargo, estos primeros huesos no pueden atribuirse aún a nadie ya que, según sus estimaciones, los especialistas esperan encontrar en ese mismo sitio los cuerpos de otras cuatro personas, que podrían no corresponder necesariamente con fusilados pero sí con fallecidos en prisión inhumados el mismo día.
En cualquier caso, Juan Luis Castro, director de las excavaciones, se entregará este miércoles a la delicada tarea de extraer los huesos de este primer sujeto. Si entonces encuentra evidencias de muerte violenta -el orificio de una bala, por ejemplo-, deberá dejar paso a la Justicia y la Guardia Civil, como marca el protocolo autonómico elaborado para estos casos. «Los jueces tendrían entonces que determinar si son competentes o no, ya que podrían decir que el crimen ha prescrito por la Ley de Amnistía», explica Castro a este periódico. «Nosotros sacaremos los restos y lo documentaremos todo de forma detallada», añade.
Las osamentas que vayan descubriéndose serán enviadas al laboratorio, donde se las someterá a un estudio antropológico (que podría prolongarse, como mínimo, 20 días) y a otro genético (de hasta tres meses de duración). Estas pruebas, en principio, no deberían encontrarse con grandes complicaciones ya que los huesos están conservados «de forma espléndida», según Castro.
Nuevas exhumaciones
Este primer hallazgo se ha producido en el quinto día, algo más tarde de lo esperado debido a la dureza de la capa de hormigón que recubría el lugar, para lo cual ha sido necesario el uso de una retroexcavacora. Sin embargo, el equipo de Castro combina los trabajos sobre esta fosa con los realizados en una segunda en la que los familiares del represaliado Sebastián García confían en comenzar a encontrar sus restos este miércoles mismo. Además, los especialistas están a la espera de reubicar la fosa de Martín Márquez, alcalde de la localidad de Cuevas del Almanzora que murió fusilado en 1939 junto a otros seis represaliados cuyos cuerpos fueron arrojados al mismo lugar. Con este ultimo, son cuatro los lugares que esperan con su apertura mostrar los cuerpos de una treintena de personas más que, durante los últimos tres cuartos de siglo, han permanecido enterrados en el subsuelo de la necrópolis.
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