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Clientes de un chiringuito de El Zapillo toman el sol, el pasado Jueves Santo. / J. J. MULLOR
Costas sanciona con 54.500 euros a diez de los doce chiringuitos de Almería
ALMERÍA

Costas sanciona con 54.500 euros a diez de los doce chiringuitos de Almería

Los propietarios de los establecimientos hosteleros prefieren pagar las multas a desmontar cada otoño sus restaurantes de playa

JOSÉ MARTÍNEZ ARIAS

Lunes, 13 de abril 2009, 14:10

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La Dirección General de Sostenibilidad de la Costa ha impuesto sanciones a diez de los chiringuitos ubicados en las playas del municipio de Almería por un importe global de 54.533 euros. Como viene siendo habitual, los expedientes sancionadores se han abierto por mantener los establecimientos instalados todo el año, cuando se trata de servicios de temporada y tendrían que desmontarse una vez que finaliza el verano.

Las sanciones impuestas a los cinco establecimientos de la playa de Almería -los ubicados entre la Térmica y Nueva Almería- ascienden a 24.117 euros, y oscilan entre los 2.919 (la más baja) y los 6.948 (la más alta). La cuantía de la sanción se establece en función de los metros cuadrados que tenga la instalación, a razón de 60 euros por metro cuadrado de chiringuito; y 30 euros por metro de terraza. Las sanciones impuestas a las tres instalaciones de Cabo de Gata suman más de 10.000 euros, mientras que los expedientes sancionadores abiertos a los dos chiringuitos de Retamar rondan los 20.000 euros.

El hecho de que los propietarios de los chiringuitos de la capital, como otros de la provincia, prefieran no desmontar las estructuras cuando acaba la temporada estival y pagar luego las sanciones, se debe a que las sanciones suelen ser inferiores al coste económico que les acarrearía las operaciones periódicas de montaje, desmontaje y almacenamiento.

Con el fin de regularizar la situación en la que se encuentran los doce establecimientos del término municipal de Almería, el Servicio de Costas tramita un expediente de concesión administrativa.

El estudio, que se prolonga desde hace más de dos años, contempla una reubicación de los chiringuitos, de manera que en todos los casos que sea posible, según Costas, se instalen fuera del dominio público marítimo-terrestre. Esto es, fuera de la arena de la playa, como manda la Ley de Costas.

Acuerdo en Cabo de Gata

Según un informe de Costas, en la barriada de Cabo de Gata no hay ningún problema para la concesión, ya que existe un acuerdo para la reubicación de los cuatro chiringuitos. Tres de ellos obtendrán pronto la concesión, mientras que el cuarto no necesitaría de dicho trámite administrativo, ya que la ubicación acordada queda fuera del dominio público.

En el caso de Retamar, está en estudio la reordenación del Paseo Marítimo para reubicar en él los tres chiringuitos. Y en Costacabana hay un chiringuito con derecho a concesión, en trámite.

El escollo para resolver de una vez el problema sigue estando en El Zapillo, donde hay abiertos cinco chiringuitos. Costas admite que el espacio que existe en el Paseo Marítimo -el tramo que va desde la Térmica hasta Nueva Almería- es «muy limitado», pero como considera que es suficiente para reubicarlos, deniega la concesión.

A la espera

La propuesta del Ministerio de Medio Ambiente es que las instalaciones se ubiquen en unas plazoletas que hay a lo largo del Paseo Marítimo. Esta ubicación, según Costas, había sido aceptada en un principio por los empresarios que explotan los chiringuitos. Sin embargo, cuando los concesionarios vieron que el Ayuntamiento se oponía al plan, cambiaron de opinión y secundaron la postura del Consistorio. Esta postura se ha visto reforzada en las últimas semanas, a la vista del respaldo dado por el ex presidente de la Junta de Andalucía y el propio PSOE, que han pedido al Ministerio de Medio Ambiente que reconsidere su posición y que analice caso por caso la situación y, por tanto, la solución de cada establecimiento.

Por eso, después de tres años de tira y afloja, todo se encuentra como al principio: a la espera de un acuerdo. En cualquier caso, y mientras se alcanza o no el acuerdo, los chiringuitos -con la concesión administrativa denegada-, han vuelto a abrir esta temporada.

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